Las 8 mejores lecciones de las películas de Disney (para grandes y chicos)

Cuando nos convertimos en padres queremos brindarles lo mejor a nuestros hijos, queremos que sientan que somos capaces de ofrecerles la seguridad y el amor necesario para que crezcan como personas íntegras y correctas ante los ojos de Dios. Podrán pensar: ¿Qué tiene que ver esto con el cine? Tiene todo que ver, ya que estamos atravesando momentos difíciles, en los que a lo bueno se le llama malo, a lo malo bueno y a lo inmoral «natural».

Algunos padres no pueden compartir mucho tiempo con sus hijos y les dan a cambio libertad total. Muchas veces no estamos atentos al contenido que nuestros hijos consumen. Desconocemos por completo qué mensaje llevan las series o films que ellos ven o de las cuales se vuelven «fanáticos». Por este motivo hice una lista de 8 películas que les recomiendo para que vean en compañía de sus hijos. Sé que son pocas y que algunas de sus favoritas no estarán en la lista, pero el mensaje y la enseñanza que nos dejan me parece muy constructivo y aterrizado al mundo en el que vivimos, y porque no celebrar junto el Día del Niño.

  1. Buscando a Nemo

La historia se centra en la angustiosa travesía de Marlin por encontrar a su hijo Nemo en medio del océano. ¿Qué no hace este pez padre desesperado por hallar a su hijo? Enfrenta sus peores miedos, sale de su zona de confort, enfrenta tiburones, ballenas, pelícanos, gaviotas, medusas, un pez monstruo; navega a través de la corriente australiana oriental y por si fuera poco tiene como acompañante a Dory, un simpático personaje que pierde la memoria cada 5 minutos. Todo porque su adorado hijo Nemo lo desobedeció, se enfrentó a él y haciendo caso omiso de sus advertencias se aventuró solo por el mar.

Esta película está cargada de lecciones, tanto para nuestros hijos como para nosotros los padres. Los niños podrán entender fácilmente que tras un acto de desobediencia viene una consecuencia, que del orgullo no queda nada, que estar lejos de casa es abrumador, que el amor de un padre o de una madre no lo reemplaza nadie, que nosotros los padres no repetimos porque sí, sino porque nuestra experiencia nos ha hecho entender que hay peligros que no queremos que ellos vivan. Y a nosotros como padres nos permite reflexionar hasta dónde van nuestros límites, ¿acaso seremos como Marlin padres sobreprotectores que no dejan a sus hijos ni asomarse a la ventana por miedo a que les pase algo?

La enseñanza final es que el amor de los padres es incondicional, y aunque comentan mil y un errores, siempre estaremos allí, esperando la reconciliación y amándolos infinitamente, tal como lo hace Dios con nosotros día a día, sin importar cuán grandes sean nuestras fallas.

  1. Valiente

Amo esta película con todo mi ser por la simple y llana razón de que no es la típica princesita que espera en la torre a que su adorado príncipe azul le haga la vida fácil, la rapte tras unos cortos espadazos, la suba a su corcel y cabalguen juntos «felices para siempre». Esta clase de premisa solo le hace entender a nuestras hijas que así es la vida, que no podemos ser felices si no conseguimos a un hombre con capa azul que nos mantenga. Mérida es una joven que sabe lo que quiere, no una niñita que canta cada dos segundos al asomarse a la ventana, está llena de agallas y rompe con las costumbres de su familia, no por simple capricho, sino porque sabe que su vida no puede terminar así, desposando a un total desconocido solo porque «ya está en edad de casarse».

Por otro lado esta película muestra que la libertada está bajo los límites de lo que es mejor para nosotros. Mérida decide estar en contra de sus padres y toma la decisión menos acertada de su vida, recurre a un hechizo que convierte a su madre en oso y corre el peligro de quedar así para siempre. La madre de Mérida no se reviste de orgullo y abandona a su familia, al contrario perdona a su hija casi de inmediato y juntas emprenden la travesía más grande de sus vidas, que sin pensarlo las unirá más que nunca y le dará la oportunidad a cada una de descubrir que, aunque piensen diferente, pueden llegar a un acuerdo. Al final de la película las dos superan sus diferencias y la reina Elinor decide romper con las absurdas costumbres del clan para darle la oportunidad a su hija de ser libre.

  1. Up: Una Aventura de Altura

Esta película puede conmover el corazón más duro y aunque el mensaje más fuerte está dirigido al público adulto, es una bella historia para compartir con nuestros hijos. Apartándonos un poco de la tristeza que invade al personaje principal, Carl Fredricksen debido a la muerte de su esposa, se trata de Rusell, un niño explorador de 8 años que intenta obtener su insignia de «asistir a los mayores». El intrépido chiquito se convierte en un tormento para Carl, pero a medida que pasa el tiempo, la amistad entre estos dos personajes se fortalece al punto de llegar a ser mejores amigos, sin concebir la edad como un impedimento. Carl, un amargado anciano, encuentra en Rusell la alegría y el entusiasmo que creía perdidos.

Up, es una película que resalta tres valores: amistad, servicio y entrega,  Carl y Rusell nos demuestran que nunca es tarde para volver a creer, ni tampoco para emprender una aventura. Al final de la película podemos preguntarles a nuestros pequeños:  ¿Qué fue lo que más te gusto de la historia? ¿Con qué personaje te identificas? O ¿Qué habrías hecho tú si estuvieras en la situación de Rusell? En ocasiones por dárnoslas de muy «adultos» subestimamos a nuestros hijos y creemos que no pueden llegar a entender la esencia de este tipo de contenidos, por ello es bueno hablar de la película después, así sabremos con certeza qué mensaje pudieron llevarse nuestros pequeños.

  1. Toy Story

No hay película más bella que plasme el verdadero significado de la amistad. Toy Story es una de mis películas favoritas, recomendada para cualquier edad y necesaria en la vida de nuestros pequeños para que conozcan las etapas que se viven durante la niñez, la adolescencia y la adultez. Andy nos representa a cada uno de nosotros, empezamos siendo pequeños y aventureros, amamos a nuestros juguetes, los llevamos a todas partes, incluso a los viajes; imaginamos cientos de historias a su lado y en las navidades o cumpleaños nos entusiasma saber que otros juguetes pueden unirse a la aventura. Después ya no nos agradan como antes, los reemplazamos por otras actividades y descubrimos que hay cosas mucho más interesantes y cuando llegamos a la adolescencia ni nos acordamos de ellos, los escondemos en cajas y finalmente, cuando ya han pasado varios años, nos volvemos a reencontrar con los que quedaron, sentimos nostalgia y recordamos con una mezcla de tristeza y alegría cuánta felicidad nos brindaron.

La amistad es el centro de esta película, todos los personajes tienen un rol esencial, pero lo que más me gusta es que está cargada de valores: el sacrificio, la entrega, la perseverancia, la fortaleza,el amor y la alegría. Todo en la misma película, la 1, la 2 y la 3 reúnen un sinfín de acciones que les pueden enseñar a nuestros hijitos lo que sucede cuando se trabaja en equipo, cuando se es parte de una familia, cuando se lucha por lo que se quiere y cuando a pesar de las dificultades se llega a la meta.

Una de las escenas más conmovedoras está en Toy Story 3, es el momento en que todos están a punto de «morir», se agarran de sus manitas, se miran por última vez angustiados pero con la seguridad de haber luchado juntos, de haberlo entregado todo; brilla en sus ojos el destello del amor y de la confianza. Finalmente todos cierran los ojos, esperando ser incinerados (en ese momento creí que iban a destruir mi infancia) pero al final todo sale bien, sobreviven gracias a los pequeños marcianitos de «Pizza Planeta».  Digo que es una de mis escenas favoritas porque eso es a lo que debemos estar dispuestos, a entregarnos por nuestros amigos, por nuestros seres queridos, por esas personas que sin serlo se han convertido en nuestra familia. Nuestros hijos deben aprender a estar con los demás no solo en los momentos de gozo, sino también en aquellos de dificultad y dolor; deben aprender a darles la mano a sus amigos cuando ya no puedan más; deben ser chiquitos a los que les gusten compartir, amar, soñar, creer y sobre todo levantarse después de la caída. Toy Story es y será siempre mi historia favorita, estaré dispuesta a hacer el «sacrificio» de verla cientos y cientos de veces más cuando el amor de mi vida, mi pequeño angelito, tenga la edad suficiente para ver una película completa.

  1. Los Increíbles

Familia. De esto se trata esta historia, como una familia compuesta por cinco personas sale adelante a pesar de las diferencias. Es una película perfecta para ver con nuestros pequeños ya que cada uno puede identificarse fácilmente con los personajes. Esta Bob, el padre, que lucha día tras día en un trabajo que no le brinda alegría, todo lo hace por su familia, por tratar de llevar una vida «normal», alejado de los súper poderes. Es el típico hombre que se levanta temprano, se va al trabajo después de darle un beso a su esposa y vuelve a casa a luchar con los quehaceres del hogar. Los conflictos y las dificultades que allí se presentan les demuestran a los niños que en toda familia hay momentos de adversidad, pero que si todos luchan unidos por el mismo objetivo todo se puede lograr. Helen, es una madre hermosa, siempre preocupada por el bienestar de sus hijos, se esfuerza por que todo esté bien en el hogar y porque su esposo sea feliz.  Por otro lado tenemos a los dos hijos mayores, Violeta y Dash, que encajan a la perfección con el público al que va dirigido la película, y por último tenemos a Jack Jack, el más pequeño de todos, el adorable hermanito menor que sorprende a todos al final con sus súper poderes.

La diferencia de la película con nuestras familias, es que no poseemos esta clase de súper poderes (fuerza, elasticidad, invisibilidad o velocidad). Pero poseemos otro tipo de súper poderes, como la comprensión, la entrega, la escucha mutua, la dedicación, el respeto etc. Cuando de familia se trata no hay pelea que valga, o acaso ¿no estamos dispuestos a hacer todo por nuestros hermanos o padres en momentos de dificultad? Los niños pueden darse cuenta fácilmente de la importancia del trabajo en equipo, la sinceridad y el sacrificio. Creo que la escena que refleja la realidad de muchas familias y situaciones en las que habitualmente están involucrados los niños es esta, la hora de la cena, en la que todos están reunidos y se discuten temas de la vida cotidiana.

  1. Intensamente

La reciente ganadora del Oscar como mejor película animada es otro de los grandes logros de Disney. La historia narra las distintas facetas a las que se enfrenta Riley, una pequeña niña en la que viven cinco emociones (alegría, tristeza, temor, desagrado y furia). A sus 11 años se enfrenta a un cambio verdaderamente significativo pues se muda de ciudad junto a sus padres y de repente la vida parece ponérsele de cabeza. Cualquier pequeño puede identificarse a la perfección con Riley.  A los chiquitos les encantará imaginar que dentro de sus mentes también habitan los divertidos personajes de la película controlando sus emociones.

En ocasiones como padres, la frustración y el desánimo parecen estar presentes más frecuente de lo que pensamos. Esta película le puede enseñar a nuestros pequeños que a medida que crecen, los cambios (tanto físicos como psicológicos) llegarán si o si a sus vidas, le permitirá a nuestros pequeños entender que todos somos diferentes, que cada ser humano maneja las emociones de distintas maneras y se enfrenta a los obstáculos de la vida bajo distintas circunstancias y alcances. Pienso que la película rescata algo muy importante para los niños y es la idea de hacerles entender que la tristeza también es necesaria en la vida de todos, de otro modo no encontraríamos alegría, emoción o satisfacción con los pequeños o grandes logros de la vida, en simples palabras sin la tristeza no conoceríamos la felicidad. Es una bella producción que además de entretenerlos les hará ver que la vida no es color de rosa.

  1. Monsters University

Amistad, aceptación, diversión, amor, alegría y perdón. Todo en la misma película. «Monsters Inc» y «Monsters University» hablan de la verdadera amistad. Sullivan y Mike Wasowski eran archi enemigos en la Universidad, sus diferencias los hacían polos opuestos: la prepotencia de Sullivan fastidiaba a Mike y la inteligencia de este era de total desagrado para Sullivan. Esta película le puede enseñar a nuestros hijos dos cosas: la primera es que la amistad puede surgir con la persona que menos imaginamos, puede llegar a ser tan fuerte como la de dos hermanos y debe estar basada en la verdad y la confianza. La segunda es que nos podemos apoyar los unos con los otros, pues las debilidades de uno pueden ser fortaleza en el otro; Mike fue rechazado por muchos, señalado de débil, desprestigiado y abucheado: ¿les suena familiar? Muchos han pasado por situaciones como esta, tal vez en su niñez y no querrán que sus hijos pasen por lo mismo, por ello es importante que criemos a nuestros hijos con amor pero también con firmeza y determinación, mostrándoles cuánta misericordia puede haber en un corazón, cuánta compasión podemos llegar a sentir por los demás y que tan lejos podremos llegar si nuestra conducta para con los demás es la adecuada.

Sullivan creyó en Mike cuando nadie más lo hacía y Mike le demostró a Sullivan que haciendo las cosas por el camino correcto se puede llegar más lejos que con trampa o malicia. La película me permite hablar del famoso «Bullying» al que muchos niños se enfrentan hoy en sus escuelas o inclusive en sus propios hogares. Mike es la muestra del resultado de la fortaleza y la dedicación, de la capacidad que cada niño tiene de ser él mismo donde quiera que se encuentre, haciendo oídos sordos a mensajes negativos emitidos por los demás. «Monsters University» le enseñará a nuestros niños a aceptar a los demás tal y como son, sin importar sus diferencias, a darse cuenta de la importancia del trabajo en equipo, a ser conscientes de que encontrar a un amigo, es verdaderamente encontrar un tesoro, y lo más importante: que los sueños sí se hacen realidad.

  1. El Rey León

Este es uno de los clásicos de Disney que no necesita mucha introducción. Simplemente resaltar el impresionante valor que tiene la escena que acaban de ver. Hay 3 elementos en ella que hacen de esta película una historia única, llena de profundas lecciones que–a mi modo de ver– ningún niño y ningún adulto se pueden perder. Primero la lucha por la propia identidad, un camino difícil, que implica entrar en nosotros mismos y asumir nuestro pasado y nuestro presente como algo querido por Dios para hilar en nuestro futuro. La segunda imperdible lección, se trata de aprender a reconocer las fragilidades y el dolor como parte de nuestra vida y no querer huir de ellos dedicándonos a la filosofía del «Hakuna Matata»  y la tercera, la más hermosa de todas, que solo en el rostro de nuestro Padre (Dios) podremos reconocer verdaderamente quienes somos y la grandeza que se encuentra en nuestro interior. Solo en la certeza de ser hijos encontramos la asombrosa riqueza de ser amados y llamados para una misión en nuestra vida.

Esta es solo una pequeña lista que les será útil repasar con sus hijos, pues no solamente le brinda una lección a los más pequeños, sino también a nosotros como padres. La tarea entonces consiste en no dejar que sea solo una simple película sino en indagar, conversar con nuestros hijos, escuchar con atención sus opiniones, saber que les gustó, que llamó la atención, con que personaje se identificarán, que les gustaría cambiar de la película etc. Podemos acercarnos a nuestros hijos de muchas maneras y el cine nos ofrece esta oportunidad, saquemos provecho de los valores y las virtudes que queremos inculcar en nuestra familia y pongámoslo como ejemplos en el diario vivir.

Existe una lista inmensa de películas que podría recomendarles, así que ¡anímense! compartan con nosotros sus películas favoritas, anécdotas o lindos recuerdos que tengan