Con final lleno de dramatismo, consiguen la victoria 40 por 34
A penas de que no estuvo Jalen Hurts en los controles, Philadelphia encontró la forma de hacer daño a Dallas por todos los frentes. Un gol de campo de 25 yardas de Jake Elliot y después un pick six Josh Sweat adelantaron a la visita por 10 puntos en el AT&T Stadium.
Pero Dallas respondió desde las piernas de Ezekie Elliot y las manos de Dak Prescott, para darle la vuelta 10-14 en favor de los Cowboys, aunque la acción estaba lejos de terminar.
Con un empate a 17 a finales del segundo episodio, Eagles contuvo a la ofensiva texana y se fue al descanso con una ventaja de 20-17. Pero la verdadera locura vendría en la segunda mitad.
Como fue costumbre durante el juego, Dallas tuvo que remontar una vez más, 10 puntos por segunda vez en tres cuartos, pero lo logró gracias a la conexión de 12 yardas entre Dak Prescott y Michael Gallup para volver a empatar 27-27.
Aunque era notoria la falta del juego dinámico que provoca Jalen Hurts por tierra, Gardner Minshew se vio en ritmo y volvió a retomar la ventaja para su equipo con un pase a Davonta Smith en la zona prometida.
Fue entonces cuando apareció la hasta entonces invisible defensiva de Dallas para primero provocar una intercepción, que terminaría en un TD de CeeDee Lamb para empatar el juego, y luego provocar un fumble para que el pateador Brett Maher diera al fin la ventaja 34-40.
Eagles tuvo un último drive y logró llegar hasta la zona roja, pero ni en cuatro oportunidades con un tiempo fuera restante pudieron llegar a las diagonales para dar la remontada.
Con este resultado, Philadelphia aún no consigue ser el sembrado número uno de la Conferencia Nacional, por lo que San Francisco y Minnesota aún podrían arrebatárselos.