El piloto tuvo que realizar un aterrizaje de emergencia en Washington DC, pues la aeronave se desplomó 300 metros
Viajar en avión siempre tiene sus riesgos, sin embargo, los pasajeros del vuelo 469 de Lufthansa Airlines, que salía Austin —capital del estado de Texas— a Frankfurt, Alemania, vivieron serios momentos de terror cuando la aeronave fue alcanzada por un rayo. Aún sin salir de Estados Unidos, el accidente causó que el aeroplano cayera en picada más de 300 metros. A la par, la luz del cinturón de seguridad —que avisa a los pasajeros cuándo ponérselo—estaba apagada. El piloto tuvo que realizar un aterrizaje de emergencia en Washington DC y los medios locales informaron que al menos siete personas resultaron heridas, sin especificar el daño de sus lesiones y solo aclarando que tuvieron que ser hospitalizadas
Vidrios rotos, caos en la cabina y una traumática turbulencia
Los pasajeros estaban sumamente aterrorizados por el accidente, el cual dejó una gran cantidad de vidrios rotos. Y es que el informe dice que una ola de turbulencia de 11 mil 277.6 metros fue la causante de todo. Los hechos se registraron el día de ayer —miércoles 1° de marzo— mientras el avión sobrevolaba Tennessee. Afortunadamente, el piloto logró mantener el control de la aeronave y aterrizar de forma exitosa en el Aeropuerto Internacional Washington-Dulles alrededor de las 21:00 horas —local—. Cabe destacar que solo habían pasado tres horas después de que el vuelo despegara con destino a Alemania.
Un hombre, que afirmó que su esposa estaba en el vuelo, dijo que “las personas que no tenían los cinturones de seguridad abrochados se lastimaron principalmente porque fue una sorpresa”. A la par, una foto muestra como bandejas de comida, recipientes, cubiertos y folletos terminaron esparcidos por el pasillo después del aterrizaje. Otro pasajero —que quiso mantener su identidad en secreto— aseguró al Washington Post que la comida “salió volando por los aires, golpeando e incluso dañando el techo del avión”.
Describió que una persona que se encontraba sentada en la fila frente a ellos, tuvo que ser sacado del avión en una silla de ruedas después de haber sido “gravemente herido”. Aclaró que el sujeto se encontraba “sangrando mucho”. Asimismo, otra persona cuya hermana y cuñado estaban en el vuelo dijo que fue “excepcionalmente aterrador, (con) muchos vidrios rotos, gritos y múltiples lesiones”, aclaró a The Sun. Por su parte, la aerolínea ofreció a los pasajeros un enlace para solicitar un reembolso después de que el caso se hiciese viral en redes sociales.
Ashley, una pasajera enojada, escribió en Twitter: “muchos de nuestros planes se han visto afectados, nuestra ropa está arruinada y definitivamente esperamos mucho más que un hotel esta noche“. Añadió que “los gustaría obtener ayuda inmediata y una compensación por el catastrófico incidente de aterrizaje forzoso que involucró al LH469“. Ahora Lufthansa Airlines se mantiene en comunicación directa con los afectados para que el caso no escale.
La tripulación cuidó a los pasajeros
De acuerdo con otro pasajero, la tripulación los cuidó durante la aterradora experiencia y en agradecimiento escribió: “@lufthansa, ¡muchas gracias por su increíble cuidado del Flt 469 esta noche! Mi familia estará eternamente agradecida por la habilidad del piloto y copiloto y el cuidado de la tripulación.”, sin embargo, la Administración Federal de Aviación (FAA por sus siglas en inglés) —entidad gubernamental responsable de la regulación de todos los aspectos de la aviación civil en los Estados Unidos. se encuentran investigando el incidente.
Fuente: Heraldo de Mexico