Redacción
Mazatlán Sinaloa QPEM. .-Kamala Harris y Donald Trump, quienes buscan posicionar en ellos su discurso con temas como la migración, el aborto y la economía, van por los cuatro estados de la frontera sur con México y sus 110 votos del Colegio Electoral son un objetivo importante.
California y Nuevo México están decantados por la vicepresidenta con una amplia ventaja. En contraste, Texas votará muy probablemente por Donald Trump; sin embargo, es Arizona donde la diferencia es mínima entre uno y otro candidato, por lo que será un estado clave en la elección, según la encuesta de FivetThirtyEight y The New York Times.
El gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, conocido por las rudas políticas contra los migrantes irregulares, como el alambre de púas en la frontera, han logrado el apoyo de la población local; en la entidad, Trump registra 59% de preferencia contra 44% de Harris.
Según una encuesta de la Universidad de Rice realizada en junio, aunque parecería una buena ventaja, el magnate tenía nueve puntos de diferencia cuando su rival era Joe Biden.
Sin embargo, no todo es positivo para los oficialistas, en California, estado natal de Harris, la identidad de la vicepresidenta, así como la tradición demócrata, le dan un triunfo seguro con 50% contra 35%, según las encuestas.
“Los latinos están experimentando los puntos débiles de la desigualdad” en la entidad”, asegura Cristina Mora, codirectora del Instituto de Estudios Gubernamentales y experta en inmigración y política racial.
Mora dijo para Los Ángeles Times, que este sector demográfico, que representa aproximadamente 3 de cada 10 votantes en California, ha sido de los más afectados por la crisis de vivienda del estado y por los efectos de la inflación, que ha disminuido en los últimos meses pero ha dejado precios altos a su paso. La falta de avances de la administración Biden en la reforma migratoria también ha disminuido el entusiasmo entre los latinos progresistas.