El influencer Jimmy Álvarez, conocido por su canal de YouTube Pongámoslo a Prueba, ha denunciado un robo que sufrió recientemente en la Ciudad de México, el cual, además de dejarle un mal sabor de boca, lo motivó a hacer un llamado a la conciencia social sobre la inseguridad y la cultura de la reventa de autopartes en el país.
El pasado 11 de noviembre, Jimmy estacionó su vehículo fuera de su oficina, ya que no encontró lugar en el estacionamiento privado. Al regresar al día siguiente, se dio cuenta de que los espejos laterales de su coche habían sido robados. Visiblemente molesto, compartió su experiencia en un video donde relató que, al consultar los precios de las autopartes en la agencia, se sorprendió al descubrir el alto costo de los repuestos: “Era un dineral. Mucho dinero para dos espejos”, comentó.
Lo que realmente le preocupó fue la reflexión sobre cómo este tipo de delitos alimenta un círculo vicioso. Según Álvarez, los ladrones venden las piezas robadas en zonas conocidas por la reventa, lo que fomenta más robos. “Estamos fomentando un círculo donde se roba cada vez más. Estos no pasa en países como Japón, donde la gente tiene conciencia y no compra cosas robadas”, expresó.
A pesar de la tentación de buscar piezas más baratas en el mercado negro, Jimmy decidió comprar las autopartes originales en la agencia oficial, aunque a un precio elevado, como una forma de no contribuir a la reventa ilegal. En su mensaje a sus seguidores, instó a reflexionar sobre las decisiones de compra, enfatizando que, al adquirir productos robados, se está perpetuando el ciclo de criminalidad.
Finalmente, Jimmy cerró su video con un mensaje dirigido al ladrón: “Espero que el dinero que obtuviste por vender mis espejos te sirva de algo”, al tiempo que hizo un llamado a la sociedad para romper con la cultura de la reventa y los robos. : “Si seguimos comprando cosas robadas, estamos contribuyendo a que haya más robos. Es un círculo que debemos romper”, concluyó.
Con su denuncia y reflexión, Jimmy busca no solo alertar sobre la inseguridad, sino también crear conciencia sobre la responsabilidad social de todos los consumidores.