Celia Cruz: legado de música a 12 años de su muerte.

Por Francis Gutiérrez Velarde

Hoy 16 de julio se cumplen 12 años de la muerte de la “Reina de la Salsa”, Celia Cruz quien con más de 70 discos y 5 premios Grammy cimentó una de las grandes carreras artísticas en el mundo y la música salsa.

A lo largo de una carrera de más de 50 años en los escenarios, cosechó multitud de éxitos, premios y reconocimientos. Es poseedora de una estrella en el Paseo de La Fama en Hollywood y Caracas, cinco premios Grammy, doctorados Honoris Causa de tres universidades de Estados Unidos, así como haber recibido en 1994 el premio National Endowment for the Arts, de manos del entonces presidente Bill Clinton, que constituye el más alto reconocimiento que otorga el gobierno de los Estados Unidos a un artista.

Multitud de discos de oro y platino, una carrera donde grabó más de 80 discos, y fue acompañada por los más grandes cantantes de su tiempo, incluidos muchos de habla no hispana, son muestra del enorme reconocimiento internacional que recibió Celia Cruz, que justamente fue llamada La Reina de la Salsa.

La tarde del 16 de julio de 2003, falleció en su casa de Fort Lee (Nueva Jersey) a la edad de 78 años. Por deseo expreso de ella, sus restos mortales fueron primero trasladados a Miami durante dos días para recibir el homenaje de sus admiradores del exilio cubano, regresando y reposando finalmente en el Cementerio Woodlawn del Bronx (Nueva York).

El gusto por el canto surgió en ella porque arrullaba a sus dos hermanos y once primos cuando eran bebés. Celia de la Caridad Cruz Alfonso es su nombre original, pero es popularmente conocida como Celia Cruz, un personaje de la música que ha ganado premios incluso después de su muerte, ocurrida el 16 de julio de 2003.

Inició su carrera artística como cantante del grupo de baile “Las Mulatas de Fuego” y después fue vocalista de la Sonora Matancera de Cuba, su país natal. Desde entonces, su estilo vocal, su personalidad alegre, su carisma frente al público y el éxito discográfico que logró, formaron un legado único para el mundo de la música.

De ánimo festivo, Cruz pronunció frases para recordar. Desde su conocida manera de decir “Aaaazúca”, hasta ideas como “Yo soy la nieta negra de Cristóbal Colón”, su sello era el humor. Llegó a decir: “Quien crea que he muerto está equivocado, a mí me han raptado los monos del zoológico”.

También son suyas frases como “Aunque no sé música soy muy musical y siempre doy mis ideas”, e inclusive: “Soy la mujer de las pelucas”. Y precisamente un rasgo que la caracterizó fue su imagen, porque no sólo sus vestidos amplios y de colores llamativos eran parte de su estilo, también usaba pelucas de diferentes colores, que siempre enmarcaban un rostro sonriente.

De las decenas de canciones que interpretó y grabó durante su amplia trayectoria, destacan “Carnaval”, que no sólo es recordable por su ritmo y coro, sino también por el tono político de una parte de la letra que inicia con: “Para aquellos que…”, y termina con las siguientes frases: “usan las armas”, “que nos contaminen”, “que hacen la guerra”, “que nos maltratan”, “que nos contagian”.

Otra canción destacable, en este caso por la adaptación de Celia, es “Yo viviré”, basada en la versión original de Gloria Gaynor, “I will survive”. La letra menciona, por ejemplo: “Oye mi son, mi viejo son/tiene la clave de cualquier generación/en el alma de mi gente, en el cuero del tambor/en las manos del conguero, en los pies del bailador/yo viviré, allí estaré”.

Una melodía más, esta vez con un énfasis particular en el estilo de cantar de Celia Cruz es “Quizá, quizá, quizá”. “Estás perdiendo el tiempo/pensando, pensando/Y por lo que más tú quieras/¿Hasta cuándo?, ¿hasta cuándo?”.