Por Adrián Simental.
Con un espectacular movimiento de Samuel Umtiti para rematar de cabeza, la táctica fija se hace presente y deja en el camino a Bélgica tras un gran mundial.
La guerra estaba cantada una cita histórica para ambos equipos, Bélgica con una generación brillante, la mejor en cuanto a nombres de su historia pretendían imponer su jerarquía, los “Diablos Rojos” buscaban tener su mejor participación a lo largo de las copas del mundo, pues desde México 1986 no llegaban a una semifinal, por el otro lado los franceses después de obtener la copa del mundo en 1998 como anfitriones, había tenido la oportunidad de ser campeón en 2006 pero caería en la final ante Italia, y Rusia 2018 era una gran oportunidad para volver a soñar con hacer historia de la mano de grandes jugadores de clase mundial.
Francia:
1.- Hugo Lloris
4.- Raphael Varane
5.- Samuel Umtiti
21.- Lucas Hernández
2.- Benjamin Pavard
14.- Blaise Matuidi (Coretin Tolisso 86´)
6.- Paul Pogba
13.- N´Golo Kanté
9.- Olivier Giroud (Steven N`Zonzi 85´)
7.- Antoine Griezmann
10.- Kylian Mbappé
Entrenador: Didier Deschamps
Bélgica:
1.-Tibaut Courtois
4.- Vincent Kompany
5.- Jan Vertonghen
2.- Toby Alderweireld
19.- Marouane Dembélé (Dries Martens 60´)
8.- Moussa Fellaini (Yannick Ferrerira Carrasco 80´)
6.- Axel Witsel
22.- Nacer Chadli ( Michy Batshuayi 91´)
7.- Kevin De Bruyne
10.- Eden Hazard
9.- R. Lukaku
Entrenador: Roberto Martínez.
Roberto Martínez sorprendió tras volver a ajustar su once inicial por cuarto partido consecutivo, ajustó ante Inglaterra, Japón, Brasil y ahora ante Francia.
Martínez cambió sobre todo el medio campo, ajustó con la inclusión de Moussa Dembélé como mediocampista de recuperación, Meunier fue baja y pasaron a jugar como laterales Alderwaireld y Chadli, quien pasó del medio campo a la lateral, gracias a su capacidad de como elemento plurifuncional, con la inclusión de Dembélé como medio de recuperación, Fellaini tenía más posibilidad de agregarse al ataque.
El inicio fue electrizante los primeros minutos para Bélgica, con tres avisos en búsqueda del primer tanto que merodeaba la portería de Hugo Lloris, con Eden Hazard entendiendo su rol protagónico y un Benjamín Pavard que no lo podía encontrar para tomarlo como referencia de marca, Bélgica capitalizó sus primeros intentos con disparos a portería, el primero cerca de los quince minutos, tras una buena entrega a las espaldas Hazard remato cruzado y el Telstar pasó rosando el poste, minutos después el mismo Hazard remató con fuerza a media altura, pero entre Fellaini y la defensa de Francia desviaron la esférica para que se desviara por arriba del marco de Lloris.
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Minutos después el envión ofensivo sobre la portería de Lloris seguiría agudizándose, tras un cobro de tiro de esquina el balón quedó a la deriva y Toby Alderwaireld le pegó a gol con gran técnica y potencia, exigiendo al máximo a Lloris quien se lanzó a media altura pegado al poste para desviar.
Tras el bochorno de los primeros minutos, los galos tomaron una bocanada de aire para un respiro con dos llegadas interesantes sobre la portería de Courtois, primero tras un tiro libre de Pavard que metió al corazón del área tratando de emular el gol ante Uruguay, pero el remate de Giroud pasó apenas desviado, después un gran recorte de Griezmann que se abrió el espacio para el remate que paso desviado, pero ya se sentía la presencia de los galos con signos vitales en ofensiva.
El dominio continuaría, un trazo largo a las espaldas de los centrales acabaría con una gran corrida de Mbappé que llegó a tiempo a la cita para mandar un trazo bueno que se coloría en diagonal ante la llegada de Giroud que cayó sobre el área y no pudo rematar con dirección de portería.
La impresión era de un partido de vértigo con llegadas para ambos lados, la calidad de los elementos estaba de manifiesto y el grado de concentración era al máximo, Fellaini era un comodín en las ofensivas de Bélgica, mientras que Kanté movía los hilos de las ofensivas y lograba aportar una buena dosis de recuperación.
Tras un cierre de primer tiempo con dos equipos bien parados, daba la impresión de comenzar a observar a dos equipos con cautela buscando cerrarle los espacios al rival.
Justo cuando comenzaba el segundo tiempo, sobre el minuto 50’ Francia encontró una luz en el sendero de la historia con un tiro de esquina, donde como tocado por los dioses Samuel Umtiti se anticipó con velocidad en el movimiento ante la marca de Fellaini quien es especialista en balón parado y le ganó el frente para rematar con fuerza y dirección de portería, poniendo el 1-0.
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Tras el duro golpe recibido en el gol, Bélgica se fue al frente buscando el empate.
Martínez le dio ingreso a Mertens, y Carrasco en lugar de Dembele y Fellaini, lanzando sus naves al vuelo, mientras que Deschamps le ingresó a N’Zonzi y Tolisso, en lugar de Giroud y Matuidi que sufrió los estragos de la batalla.
Bélgica estaba totalmente lanzado al frente De Bruyne y Hazard intentaban de media distancia, Lloris resolvía de buena manera, con Batshuayi en el campo Bélgica intentaba lanzar al área con Lukaku y Batshuayi como referencia.
Pero la calma para manejar el balón de los franceses le dio pocas opciones a los belgas para generar peligro.
Pogba y Mbappé cuidaban el balón como a la niña de sus ojos para que al final el tiempo se consumiera para terminar los 90 y los 6 de agregado, regresando.
Bélgica se quedó como caballo negro con grandes muestras de su calidad a lo largo de la competencia, que se vio frustrada y de detenida ante la solidez francesa en el instante definitivo.
Ahora Francia buscará hacer historia el próximo domingo en Moscú emulando la historia tarde como local en 1998.
Jugador del partido: Samuel Umtiti.
Momento del partido: El gol de Umtiti a balón parado para hacer la diferencia.