Destacó la importancia de realizar un sistema popular de ahorro-crédito, mediante un cambio en la mentalidad; organizándose desde abajo, pidiendo un marco igualitario que valore la economía social de México
En México existe la necesidad de reorganizar a los ejidos, las cooperativas pesqueras y comunales, así como valorar la reorganización de base para construir alternativas de empleo y construir una fuerza que le venga a dar soporte a las acciones del nuevo gobierno, indicó Isabel Cruz Hernández, presidenta de la Asociación Mexicana de Uniones de Crédito del Sector Social (AMUCSS).
Al impartir la conferencia titulada “Inclusión Financiera: Impulso del Bienestar Social”, señaló que la economía social y el fomento al cooperativismo es un cambio radical en la manera de ver el desarrollo del país, porque exige algo que nunca se ha tenido que es “ciudadanía”; ser conscientes de que tenemos derechos pero también obligaciones, que el gobierno no puede dar todo, añadió que hoy se tiene la oportunidad de cambiar esas tendencias, pero para que haya éxito en estos programas del gobierno de la república es necesario la organización de la sociedad.
La expositora citó que en Alemania se dieron las primeras cooperativas en el XIX y que en la actualidad los médicos están organizados en cooperativas; los médicos, los panaderos, los agricultores en cooperativas de comercialización, de ahorro y crédito, de insumos, de medicinas para los animales, es decir, todo se da por medio del cooperativismo, ya que la cooperativa no es una organización social ni una ideología sino pequeñas empresas hechas para que los socios tengan los mejores servicios al mejor precio y con la máxima calidad.
La presidenta de AMUCSS dijo a los asistentes al foro Economía Social y Fomento al Cooperativismo en el marco de las Nuevas Políticas Públicas, realizado en el Congreso del Estado, la importancia de realizar un sistema popular de ahorro-crédito, mediante un cambio en la mentalidad; organizándose desde abajo, pidiendo un marco igualitario que valore la economía social de México, que facilite la construcción de las instituciones y que no imponga reglas que son para los bancos, así como analizar verdaderas experiencias de economías sociales exitosas y tener resuelto el acceso al crédito.
Finalmente, aseguró que México tiene un futuro prometedor si se organiza desde abajo, ya que ya existe voluntad política para establecer programas sociales, e invitó a los sinaloenses a voltear hacia abajo y ver lo que tienen alrededor y asumir el compromiso de que puedan construir una economía social y solidaria eficiente, transformando y segura que no dependerá de cambios de gobierno, de modas o diseños de funcionarios, con esto las comunidades del Estado podrán tener una mayor capacidad de negociar recursos externos para el desarrollo local.