POR NELLY REJÓN ORTIZ
Sin duda alguna la concentración – se habla de más de 110 mil personas- que se registró este domingo en el Zócalo de la CDMX con motivo de la celebración del primer año de gobierno de Andrés Manuel López Obrador, dejan de manifiesto que el tabasqueño goza de una gran aceptación entre los mexicanos.
Ahí, ante miles de seguidores, AMLO mencionó que de los cien compromisos que hizo a lo largo de su campaña y posteriormente durante un acto en el mismo zócalo el 1 de diciembre de 2018, 89 de ellos se han cumplido, mencionando cifras para ilustrar sus aseveraciones.
Hizo mucho énfasis en el logro alcanzado a través de la implementación de programas con sentido social como son las pensiones universales a los adultos mayores; becas para todos los niveles escolares; jóvenes construyendo el futuro; sembrando vida; apoyos a niños y niñas con discapacidad de familias pobres entre otros.
De manera simultánea se llevaba a cabo una marcha de los que están en contra del gobierno federal, en la cual, a decir de los que cuentan estas concentraciones, no llegaron a diez mil participantes, lo cual de ninguna manera resulta impedimento para saber que también hay detractores del ejecutivo federal y que de alguna forma sería sano si esos inconformes pertenecieran a una oposición responsable y propositiva y no como la que estamos observando encabezada por dos ex presidentes de la república como Vicente Fox y Felipe Calderón , que por cierto no se supo si andaban en la marcha, mismos que tuvieron en sus manos la valiosa oportunidad de realizar cambios sustantivos en bien de nuestro país pero no lo hicieron y ahora como agoreros de la desgracia se dedican a lanzar más que criticas, comentarios con el único fin de aparecer en los medios, triste situación pues para ese par.
Durante su mensaje de más de una hora, AMLO hizo un extenso reconocimiento a las fuerzas armadas, las cuales, por cierto, durante los últimos dos sexenios fueron utilizadas y expuestas al escarnio público a raíz de los garrotazos al avispero hechos de manera por demás irresponsable por parte de Felipe Calderón, de tal suerte que ya era hora que les dieran el lugar que merecen como instituciones que deben ser respetadas y quizá de las únicas que quedan que son respetables.
El presidente también reconoció, lo cual es sano para él mismo, que en el tema de inseguridad tiene un reto complicado pero no imposible de superar y mucho menos impostergable, lo que nos indica que tiene plena conciencia de que es una asignatura pendiente, bien por eso y porque nos delinea a un estadista……..
Pues aquí estamos de nueva cuenta en las filas de Qué Pasa en Mazatlán luego de unas inmerecidas pero necesarias vacaciones….
Nos vemos en otra DIMENSIÓN SINALOENSE…..