Mazatlecos confían en Samuel Lizárraga para hacer un buen gobierno

Durante años Mazatlán se ha visto inmerso en un estancamiento urbano que se ha presentado a lo largo de varias administraciones, situación que se ve reflejada en las carencias que día a día pudo observar en sus recorridos de campaña por colonias y poblados del municipio, manifestó Samuel Lizárraga Camacho, candidato a la alcaldía de Mazatlán por el partido Fuerza por México.

La ciudadanía manifestó durante la etapa proselitista que el puerto requiere de una persona que realmente sepa hacer gobierno para todos y no solo a un solo sector, por ello ven en Samuel Lizárraga la mejor opción para poner fin a las necesidades que por años los han aquejado.

“Los proyectos que traemos se encuentran bien elaborados y apegados a planeación estratégica con los que se buscará verificar los errores que se han cometido por los gobiernos y las soluciones que se les pueden dar”, señaló.

Lizárraga Camacho puntualizó que el no contar con manuales actualizados en la administración municipal provoca que se dé un deterioro en el crecimiento de la ciudad y eso, a su vez, que no se enfoquen los esfuerzos en la mejora de las áreas de servicios públicos, drenaje, seguridad y agua, entre otros.

Por esa razón es importante buscar que cada una de las direcciones mejoren sus funciones.

“El cambio se tiene que dar de manera muy firme, ahorita se puede, ya que tenemos una crisis política al no contar con candidatos que tengan perfiles adecuados, que solo buscan continuar en el poder”, alertó.

El contendiente por la presidencia municipal indicó que este 6 de junio es importante que los mazatlecos salgan a emitir su voto, ya que van a decidir si quieren un cambio real o seguir con las mismas promesas sin cumplir por quienes ya han estado en el gobierno.

“Le pido a la gente que vaya y emita su voto. Que lo hagan por las personas que estén conscientes de que pueden traer realmente un beneficio para Mazatlán, la ciudadanía, sus familias y su futuro”, indicó.

Esto, dijo, debe de cambiar, y el día que Samuel llegue a la silla, no hay colores porque nosotros vamos a gobernar para todos en general.