¿Qué es?
Julio Sin Plástico es un movimiento global que desde el 2011 ha ayudado a millones de personas a ser parte de la solución a la contaminación por plásticos, especialmente a los de un solo uso.
Este movimiento fue iniciado por Rebecca Prince-Ruiz, la fundadora de Plastic Free Foundation, y en la actualidad es una de las campañas ambientales más influyentes del mundo.
¿Porqué la importancia de este movimiento?
En el mundo se producen aproximadamente 380 millones de toneladas de plástico al año, siendo que los plásticos de un sólo uso representan aprox. el 50%. De estos, terminan en el océano alrededor de 10 millones de toneladas, lo que equivale a vaciar un camión de basura cada minuto, ocasionando, entre otras cosas, la muerte de un millón de animales marinos al año.
Por lo tanto, el plástico, o mejor dicho, el mal uso que le damos, representa una amenaza para nuestro planeta y la vida como la conocemos.
Campañas globales, como Julio Sin Plástico, son de vital importancia para la concientización colectiva y así poder aspirar a tener calles, parques, océanos limpios y libres de plástico.
¿En qué consiste Julio Sin Plástico?
Básicamente, en rechazar/reducir los plásticos de un solo uso en el hogar, el trabajo, la escuela, donde vayamos. La idea es enfocar los esfuerzos durante todo un mes, para conocer y probar diferentes opciones a los plásticos de un solo uso y poder seguir aplicando estas alternativas siempre.
Debe ser difícil ¿no?
No te voy a mentir, es un reto, ya que vivimos en una cultura basada en el “usar y tirar” y con fuerte arraigo al plástico, sin embargo, si es posible hacerlo.
De hecho, es más fácil de lo que crees, ya que anteriormente a la masificación del plástico, prácticamente todo era retornable, todo se reutilizaba, todo era hecho para durar, nada se tiraba. Así que las soluciones existen, solo tenemos que comenzar a retomarlas y adaptarlas a nuestras propias necesidades e ir cambiando, poco a poco, nuestros hábitos de consumo.
¡Quiero ser parte de este movimiento! ¿por dónde empiezo?
Es sencillo, con un poco de planeación y organización se puede salir victorioso de este reto. A continuación te comparto unos tips que nos han funcionado y espero también te puedan ser de utilidad.
Básicos
- Empecemos por el principio, ¿qué tanto plástico consumes? Si no lo tienes claro, revisa tu bote de basura (suena raro, pero es un ejercicio muy ilustrativo) e identifica qué tipo y cuánto plástico consumes.
- Comienza a cuestionarte << ¿realmente lo necesito? >> , << ¿con qué o cómo lo puedo sustituir? >> y date la oportunidad de pensar en las opciones que ya tienes disponibles en casa (como el frasco de vidrio o el periódico que ibas a tirar, o el termo que tienes guardado desde hace años).
En el hogar
- Para la higiene personal, elige opciones simples, naturales, sólidas, como una simple barra de jabón, champú solido, estropajo o luffa, sin empaques.
- Para un ciclo menstrual sin plástico, puedes elegir toallas de tela o la copita menstrual.
- Opta por un rastrillo de metal reutilizable (como los de antaño) en lugar de uno desechable de plástico.
- Para la higiene bucal, hay opciones como los cepillos de dientes de materiales de fuentes sustentables y compostables, como el bambú, y la pasta dental hasta la puedes hacer tu mismo.
- Para la limpieza del hogar, están las opciones de toda la vida, como el bicarbonato de sodio, jabón multiusos en barra (como el Jabón García), estropajos y cepillos de fibras naturales, entre otros.
- Para guardar la comida en el refrigerador, por ejemplo, se pueden reutilizar frascos de vidrio con tapa. Para el congelador, hay alternativas de bolsas reutilizables de silicón o frascos de vidrio, idealmente los diseñados para conservas y de boca ancha, con su respectiva tapa, y sin llenarlo hasta el borde para que el alimento tenga espacio para expandirse cuando se congele.
- Forra tu bote de basura con periódico en vez de bolsas de plástico.
Cuando sales de casa
- Arma tu kit de reutilizables y ponlo en un lugar estratégico en casa para que no lo olvides al salir. Tu kit puede incluir cubrebocas, cubiertos, termo o vaso, toper, popote, lo que necesites.
- Cuando vayas al café, lleva tu termo o taza. Cuando vayas a comer fuera, lleva tu toper y utensilios (en caso que ofrezcan desechables). Cuando vayas a la panadería, lleva tu bolsita de tela.
- Aprende a decir no. Por ejemplo, cuando pidas algo de beber puedes decir: “sin popote, por favor”; en la tienda puedes decir: “sin bolsa, por favor”.
- Evita los productos de un solo uso que realmente no necesitas, por ejemplo: bolsas, utensilios, popotes, condimentos y salsas en empaques individuales, contenedores de comida para llevar, entre muchos otros más.
- Elige la versión retornable de tus bebidas favoritas, por ejemplo, de cerveza o de refresco.
- Trata de evitar el supermercado, ya que está inundado de plásticos de un solo uso y productos sobre empaquetados y ultra procesados. Mejor, elige los mercados, tienditas a granel y tienditas locales, donde hay más productos naturales y frescos, y es mas fácil que te permitan usar tus propias bolsas, contenedores y envases reutilizables.
Aunque ya estamos a mediados de Julio, ¡nunca es tarde para comenzar! ¿Te unes al reto?
Por un mundo libre de plástico.