El Gobernador Gavin Newsom ha declarado el estado de emergencia mientras las llamas continúan arrasando áreas cercanas a Pacific Pasilades.
California está viviendo un desastre sin precedentes, con incendios forestales que azotan el sur del estado, especialmente en la exclusiva zona de Pacific Palisades, en los Ángeles. El fuego, alimentado por fuertes vientos, ha destruido más de 1,200 acres de tierra y sigue extendiéndose rápidamente poniendo en peligro la vida de miles de residentes y la infraestructura de la región.
Una tragedia en expansión
Los incendios, que comenzaron el 7 de enero por la mañana, no han sido contenidos y se estima que están consumiendo cinco campos de futbol por minuto. Los vientos han dificultado la labor de los bomberos y los aviones encargados de la extinción, haciendo que las llamas se propaguen con mayor rapidez. En respuesta a esta emergencia, el Gobernador Gavin Newsom declaró el estado de emergencia, movilizando a más de 1,400 bomberos para enfrentar la crisis.
“La situación en Pacific Palisades sigue siendo grave, y las autoridades están trabajando a toda hora para contener el incendio”, comentó el gobernador en su cuenta de X. “Manténganse alertas, tomen precauciones y sigan las instrucciones locales”, instó a los residentes del sur de California.
Evacuación masiva y amenazas constantes
La evacuación de más de 30,000 personas ha sido ordenada en las zonas afectadas, mientras que 13,000 hogares cercanos a la costa están en riesgo debido a la cercanía a Pacific Pasilades, es la más afectada. Los residentes, que tuvieron poco tiempo para abandonar sus hogares, es la más afectada. Los residentes, que tuvieron poco tiempo para abandonar sus hogares, han sido evacuados a refugios de emergencia.
El clima agrava la situación
Además de los vientos intensos, se espera una tormenta de viento en las próximas horas, lo que podría empeorar aún más la propagación del incendio. Las autoridades temen que lo peor aún esté por llegar, ya que las condiciones meteorológicas siguen favoreciendo el avance de las llamas.
Casi 62,000 personas sin electricidad
El impacto de los incendios no solo ha sido ambiental, sino también económico y social. Más de 62,000 personas en el condado de Los Ángeles se han quedado sin electricidad debido a los daños en las infraestructuras, lo que complica aún más las labores de evacuación y seguridad.
Apoyo federal y local
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha expersado su apoyo total a California y ha ofrecido la ayuda federal necesaria para mitigar la tragedia. La Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA) ya ha aprobado una subvención para asistir en el manejo de los incendios y en los costos de extinción.
Un futuro incierto
Mientras tanto, los residentes y autoridades de California se preparan para lo peor, la incertidumbre sobre el origen del incendio y las posibles víctimas sigue siendo una preocupación, aunque hasta el momento no se han reportado muertes ni heridos graves. Las investigaciones continuarán mientras los bomberos luchan contra el fuego y los esfuerzos de evacuación siguen en marcha.
Con la amenaza de más vientos y la constante propagación del fuego, las autoridades siguen urgentes a su llamado a la precaución y la cooperación de la población. Sin duda, la situación sigue siendo crítica, y los habitantes de California enfrentan uno de los incendios más devastadores en la historia reciente del estado.
MG.