Tras horas de angustia y un operativo de búsqueda en condiciones extremas, los dos alpinistas que habían sido reportados como desaparecidos en el Pico de Orizaba fueron localizados sanos y salvos en la localidad de Máquina Vieja, en el municipio de Tlachicuca, Puebla.
Una peregrinación que se tornó peligrosa
Los hombres, de 34 y 35 años, habían ascendido al volcán como parte de una peregrinación alpina. Su último contacto con familiares ocurrió el domingo a las seis de la tarde, lo que encendió las alarmas y llevó al despliegue de un operativo especial de búsqueda encabezado por Protección Civil y el Club Alpino Guadalupe, un grupo de voluntarios con experiencia en rescates de alta montaña.
El panorama no era alentador: las intensas nevadas y las temperaturas extremas de las últimas 72 horas complicaron las labores de localización. Los rescatistas comenzaron la búsqueda a pie desde la medianoche del lunes, cubriendo las laderas sur y suroccidental del volcán.
La aparición milagrosa
Afortunadamente, la historia tuvo un desenlace positivo. Este lunes por la mañana, los familiares de los alpinistas notificaron a las autoridades que ambos hombres habían logrado descender por su cuenta y se encontraban en Máquina Vieja, una comunidad cercana al volcán.
Tras confirmarse su estado de salud, el operativo fue oficialmente desactivado. Las autoridades agradecieron la colaboración de los rescatistas y voluntarios que trabajaron incansablemente bajo condiciones extremas para asegurar el regreso de los alpinistas.
La montaña más alta y desafiante de México
El Pico de Orizaba, también conocido como Citlaltépetl, es el volcán más alto de México y el tercero más alto de América del Norte, con una altitud de 5,636 metros sobre el nivel del mar. Su majestuosidad lo convierte en un destino atractivo para alpinistas y peregrinos, pero también en un lugar peligroso, especialmente durante el invierno, cuando las nevadas y las bajas temperaturas hacen que las condiciones sean extremadamente desafiantes.
Un llamado a la prevención
El incidente es un recordatorio de los riesgos que implica ascender montañas de gran altitud son la preparación y el equipo adecuados. Las autoridades reiteraron la importancia de seguir las recomendaciones de seguridad, mantenerse en contacto constante con familiares y acudir siempre en compañía de guias experimentados.
Gracias a la pronta respuesta de los equipos de rescate y a la fortaleza de los alpinistas, esta historia terminó con un final feliz que celebra la vida y la resiliencia en uno de los paisajes más desafiantes de México.
MG.