En medio del duelo por el fallecimiento del productor Guillermo del Bosque, dos de las mujeres más importantes de su vida sorprendieron al mostrarse unidas y en paz: Vica Andrade y Mónica Noguera compartieron un emotivo reencuentro, dejando atrás cualquier sombra del pasado.
La conductora costarricense reapareció en redes sociales no solo para compartir imágenes inéditas del encuentro con la exesposa de su marido, sino también para aclarar tajantemente los rumores sobre una supuesta herencia millonaria.
“El tema de la herencia millonaria que dejó mi esposo es una rotunda mentira. Yo no he dado ni una sola declaración y así deseo permanecer”, escribió Vica en su cuenta de instagram.
La publicación incluyó varias fotografías familiares en las que se puede ver a Vica junto a sus tres hijos -dos de ellos fruto de su relación con Memo y uno de una relación anterior- compartiendo un momento íntimo y cálido con Mónica Noguera. Junto a las imágenes, Vica escribió:
“Familia por siempre. Ninguna arma forjada contra mi familia prosperará, porque su mano está sobre nosotros”.
Este gesto sorprendió a muchos, recordando el polémico triángulo que marcó sus vidas a finales de los 90. Tras su separación de Mónica Noguera, Guillermo del Bosque inició una relación con Vica Andrade, lo que generó una ola de especulaciones sobre una posible infidelidad.
Sin embargo, con el paso de los años, tanto Vica como Mónica aclararon que no hubo traición. Incluso Noguera confesó en una entrevista que estaba enterada del acercamiento entre su exmarido y su amiga, y que no existió ningún resentimiento.
“Ellos se enamoraron cuando Memo y yo ya no teníamos absolutamente nada que ver”, relató Mónica en una entrevista para El minuto que cambió mi destino, donde también explicó que Vica intentó incluso reconciliarlos en su momento.
Hoy, más de dos décadas después, la historia da un giro inesperado pero lleno de humanidad: dos mujeres unidas por el amor a una misma persona, cerrando filas en nombre de la familia, el respeto y la memoria.
Lejos del escándalo, la imagen que queda es la de una convivencia pacífica, donde el pasado quedó atrás y la prioridad son los lazos que perduran más allá de cualquier historia.