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Último adiós a Francisco: el Papa que caminó con el pueblo regresa por última vez a San Pedro

El mundo católico vive un momento histórico y profundamente emotivo: el papa Francisco, figura de cercanía y renovación en la iglesia, ha regresado por última vez a la Basílica de San Pedro. Su cuerpo, ahora expuesto en una capilla ardiente al nivel del suelo y sin las pompas tradicionales de sus antecesores, podrá ser visitado hasta el viernes por los fieles que deseen despedirse del pontífice argentino.

A las 9:00 de la mañana de este miércoles 23 de abril, comenzó el solemne traslado del féretro desde la residencia de Santa Marta, donde vivió desde el inicio de su pontificado, hasta la majestuosa basílica vaticana. La procesión, encabezada por el camarlengo Kevin Joseph Farrell, inició con una oración en la capilla privada del papa y recorrió la Plaza de Santa Marta, la de los Protomártires Romanos y el Arco de las Campanas, hasta llegar al corazón espiritual de la cristiandad.

Lo acompañaron cardenales, arzobispos, obispos y otros miembros del clero, todos revestidos con sus trajes litúrgicos. El ataúd fue recibido en el Altar de la Confesión, justo frente al sepulcro del apóstol Pedro, donde el camarlengo presidió una Liturgia de la Palabra cargada de simbolismo.

Fiel a su estilo austero y humilde, Francisco descansa en un féretro sencillo de madera y zinc, sin pedestal ni catafalco. Sus restos reposan directamente sobre el suelo de la basílica, permitiendo que los fieles se acerquen sin barreras al líder que hizo de la sencillez su bandera. Lleva una sotana roja, la mitra papal y un rosario entre las manos, en un último gesto de oración.

El Vaticano ha entrado oficialmente en periodo de Sede Vacante, una etapa de transición que no solo suspende el poder terrenal del papado, sino que también abre un espacio de reflexión y expectativa. Ya se han iniciado las primeras reuniones de cardenales en Roma, una suerte de antesala al cónclave que elegirá al próximo pontífice en la Capilla Sixtina.

Mientras tanto, los preparativos para el funeral, que se celebrará este sábado, avanzan con precisión milenaria. Se espera la llegada de miles de fieles y decenas de delegaciones internacionales. Roma ha desplegado un fuerte dispositivo de seguridad para garantizar el orden en esta despedida multitudinaria.

Francisco no solo será recordado como el primer papa latinoamericano, sino también como el pontífice que abrió las puertas del Vaticano al mundo, que abrazó a los marginados y que quiso que la iglesia volviera a caminar al lado del pueblo. Hoy, ese mismo pueblo camina para despedirlo.

Su legado comienza a escribirse, mientras la iglesia se prepara para abrir un nuevo capítulo.

 

 

MG.