Lo que debía ser una celebración llena de alegría en Liverpool se transformó en una escena de caos y horror, cuando un hombre embistió con su vehículo a una multitud durante el desfile de campeones del Liverpool FC. El incidente dejó al menos 27 personas hospitalizadas, incluyendo cuatro menores de edad, mientras otras 20 fueron atendidas en el lugar.
El atropello ocurrió la tarde del lunes en Water Street, una zona del centro de la ciudad que se encontraba repleta de hinchas celebrando la victoria del club en la Premier League. Testigos relataron momentos de pánico cuando una minivan gris irrumpió en la multitud, arrollando cuerpos y provocando gritos desesperados.
La policía de Merseyside confirmó que el conductor, un hombre británico de 53 años, fue detenido en el lugar y aseguraron que, aunque la investigación sigue en curso, el hecho no está siendo tratado como un atentado terrorista. “Pedimos a la ciudanía no caer en especulaciones”, señalaron las autoridades.
Nick Searle, jefe del Servicio de Bomberos y Rescate de Merseyside, describió una escena impactante: varias personas atrapadas bajo el vehículo, entre ellas un niño. Equipos de emergencia llegaron rápidamente al sitio y continúan laborando, mientras el área fue acordonada y permanece bajo resguardo.
David Kitchen, representante del Servicio de Ambulancias del Noroeste, informó que dos de los hombres se encuentran en estado grave. También relató que un paramédico en bicicleta fue embestido, aunque sin lesiones de gravedad.
Videos y fotos del suceso circulan en redes sociales, mostrando la fuerte presencia policial, camillas en movimiento, vidrios rotos y una multitud conmocionada. En uno de los clips se observa el momento en que el vehículo embiste personas antes de detenerse por unos segundos y luego acelerar nuevamente contra la multitud.
“Fue horrible”, declaró Harry Rashid, un asistente al desfile que presenció el ataque junto a su familia. “Primero solo se escuchó el golpe. Luego, la gente intentó detener el auto. Rompían las ventanas, pero el conductor volvió a acelerar y pasó por encima de más personas”.
La presidenta del Reino Unido, Keir Starmer, expresó su consternación: “las escenas en Liverpool son espantosas. Mis pensamientos están con todos los heridos y sus familias. Agradezco la rápida reacción de los cuerpos de emergencia”.
El desfile había sido organizado por el club Liverpool FC para celebrar su reciente campeonato, con jugadores y cuerpo técnico saludando desde un autobús descapotable mientras misiles de aficionados encendían bengalas y coreaban cantos.
Lo que debía ser una fiesta roja se convirtió en una jornada negra para Liverpool. La ciudad ahora intenta comprender cómo una celebración terminó en tragedia.
MG.