El talento creativo de Jorge González Neri será reconocido en Carnaval

El pintor, escultor y escenógrafo regiomontano Jorge González Neri recibirá un reconocimiento durante las festividades del Carnaval Internacional Mazatlán 2015 “Los sueños de Momo”, por 25 años de desbordada creatividad en la construcción de carros alegóricos.

DSC_6674Aunque desde hace un cuarto de siglo incursionó en los desfiles, a lo largo de 35 años el artista plástico ha construido uno de los legados más significativos en la historia reciente del Carnaval Internacional de Mazatlán.

Con un impresionante currículum que incluye exposiciones nacionales e internacionales, así como una amplia experiencia en producciones escénicas junto a artistas de la talla de Plácido Domingo, su participación en la máxima fiesta del puerto ha sido gradual.

“En los primeros años yo realizaba escenografía para algunos eventos de coronación, llevaba mi equipo de gente y no había teatro, en el Cine Zaragoza se armaba un escenario. Poco a poco surgió la oportunidad de participar en el desfile, con un carro, luego dos, hasta llegar a ser una parte del desfile, como ahora”.

González Neri vio crecer el colorido, animoso y modesto ambiente de los años 80, en el veloz, burbujeante y ambicioso ritmo de los 90; y de la misma forma, señala el maestro, sus alegorías rodantes se transformaron.

“Hubo carros muy especiales, propuestas muy especiales en los años 90, 92, 93, un poco atrevidos, proponíamos cosas no tan convencionales, tan decorativas.

Los gigantes del Carnaval 

Cada vez más contagiado del puerto, compenetrado con su ánimo bullanguero, el entusiasmo y el gusto por las sorpresa que tanto adora el pata salada, González Neri _MG_1334estaba por crear uno de los sellos inequívocos que anuncian de forma desbordada que la fiesta ya está cerca: los Monigotes.

“Se hacían algunas cosas, simples, sin mucho diseño. Arlequines un poco grotescos, y poco a poco intervenimos; en una ocasión hicimos unos diseños de unos alebrijes que impactaron mucho abriendo el colorido del carnaval, no eran bonitos pero tenían un sentido plástico, unos los criticaban a otros les gustaban, y fuimos evolucionando con técnicas diferentes, con materiales nuevos; el mayor impacto se dio a partir de la Serie del Caribe, en 2005, CULTURA escogió la temática en base a figuras plásticas diseñadas por Antonio López Sáenz, beisbolistas y músicos, y eso fue un golpe, fue muy exitoso”.

Desde entonces, esos gigantes de más de 500 kilos, se alzan sobre la arteria más característica del puerto, y a sus ocho o diez metros de altura, se convierten en faros que dan ideas claras de los temas que arroparán a los seis excesivos y mágicos días del Carnaval de Mazatlán.

Un legado a pulso

_MG_1345Este 2015, “Los sueños de Momo” serán testigos del reconocimiento que el propio Carnaval le hace a Jorge González Neri, alguien que se siente agradecido por la oportunidad de que su trabajo haya alcanzado a una audiencia impensable.

“Como artista plástico, cuando trabajas como pintor, la gente que te ve es un público reducido, y sin embargo, en el caso del Carnaval, pues imagínate qué cantidad de gente admira tu trabajo o lo disfruta. Eso es algo de lo más significativo que me ha dado el carnaval de Mazatlán”.

Pero como todas las grandes satisfacciones de la vida, llegar a este punto a requerido que el artista plástico sedujera a la ciudad, y convenciera al maestro que por años reinó como el único hombre capaz de poner color y forma a la fiesta, el ya legendario Rigoberto Lewis.

“Mira, yo creo que una de las cosas interesantes que pasaron es que nos fuimos ganando a la gente de Mazatlán, y particularmente, pues a quien era el ícono representativo del Carnaval, y que siempre había hecho todo, Rigo Lewis. Si había al principio un pequeño celo, una cosa así de, ¿cómo viene alguien a invadirnos? Y sin embargo, poco a poco fue cediendo terreno, aceptando que nosotros participáramos, y fue tan interesante que incluso en algunas ocasiones que no participamos en el Carnaval, él aprovechó algunos elementos que se habían hecho, les hacía modificaciones al estilo de él, y los utilizaba… quería decir que no le disgustaba lo que hacíamos”.

Para cosechar todo esto, el maestro González Neri sabe que ha sido necesario darse al máximo y con esto, permitir que sus visiones, ideas _MG_1370y pasiones se desgajen en los vientos del Carnaval.

“Le he dado todo mi interés, todo mi cariño para hacer siempre las cosas de mejor manera, que la gente lo siga disfrutando. Nos esmeramos en la calidad del trabajo, en que quede una huella, no nuestra, sino de todo el trabajo, que quede un impacto, que la gente lo recuerde. Porque es como todo, si la gente no lo recuerda, significa que no cumplimos con la encomienda, el chiste es que quede un recuerdo”.