De no obtener recursos para el cierre de año recurrirá a un crédito bancario adelanta el rector Juan Eulogio Guerra.
Se necesitan 550 millones de pesos
Para el cierre del año, la Universidad Autónoma de Sinaloa requiere 530 millones de pesos para cubrir sueldos y prestaciones principalmente.
Ante el anuncio de recorte presupuestal en algunos programas, se podría solicitar un préstamo adelantó el rector Juan Eulogio Guerra Liera.
Entrevistado en Mazatlán a donde acudió para inaugurar la XXIII Conferencia Anual de la Asociación Mexicana Para la Educación Internacional, AMPEI, dijo que solicitará este jueves al consejo universitario permiso para un empréstito que permita hacer frente a las necesidades financieras.
Adelantó que este viernes participará en una reunión con el subsecretario de educación superior, Salvador Jara Guerrero y autoridades de las Secretarias de Hacienda y de Educación para revisar la situación de 29 universidades, y las alternativas económicas para el cierre del año.
“Tenemos el cierre del año y el presupuesto del 2016 y creo que las universidades también debemos de comprometernos a mejorar algunos aspectos que sabemos deben mejorarse. En el caso de la UAS sabemos que cambio el marco normativo, esto es quitar la jubilación dinámica, los nuevos ingresos a partir del año que viene. Sobre la respuesta que tengamos el viernes, vamos a ver el futuro de la institución. Ocupamos 550 millones de pesos . Hoy en el congreso universitario voy a pedir un permiso para pedir un crédito bancario previendo el peor de los escenarios “.
Guerra Liera explicó que primero se garantizará el pago a quienes tienen a la universidad en los primeros lugares, a lo que tienen derecho y que es su salario y prestaciones.
“Yo espero que haya apoyo, luz hacia donde vamos y que podamos resolver esta situación. La cantidad va a depender de la respuesta
que nos den el día de mañana (viernes). Si nos resuelven todo, no pedimos nada. Pero si no hay apoyo tendremos que ajustar y además enfrentamos un recorte de 70 por ciento de lo que se conocía como PIFI y en donde la universidad se hizo acreedora de 52 millones de pesos y nos notifican que nada mas nos van a dar 16 millones de pesos”.
El rector calificó la medida como un golpazo porque ese recurso es para atender a las unidades que se acreditan y la infraestructura. Esto pone en riesgo la calidad educativa por las condiciones en que se atenderían a los estudiantes.
“Puede llegar a fingirse calidad en la educación y esto quien lo pagaría sería el futuro del país y el desarrollo se estancaría aún más”.
Juan Eulogio Guerra insistió en que ya no se está dispuesto a que parte del presupuesto se vaya a mantener la jubilación dinámica, por la crisis en el país. Teníamos la jubilación y aparte nos dimos otra y sin prever de donde vamos a sacar el recurso. No es ético ni moral que lo que venga para investigación se utilice para pagar salarios”.
El año pasado la UAS también recurrió a un crédito bancario para subsanar la falta de recursos.