Tal vez para la mayoría de los sinaloenses, este nombre le sea “mundialmente” desconocido. Es más, hasta para los priistas.
Pocos, muy pocos recordarán que este señor, de sangre tricolor, originario de Los Mochis, saltó a la fama por haberse registrado –al cuarto para las 12- como precandidato a la gubernatura del estado, pretendiendo hacerle “sombra” al entonces candidato oficial, Quirino Ordaz.
Pero don Melchor resultó ser un “bulto” que le pusieron a Quirino para que éste, de acuerdo con la ley electoral, pudiera hacer precampaña.
Claro que don Melchor se prestó para eso. Sabía perfectamente el “papelote” que iba a jugar en la precampaña interna.
Su rol fue el de un precandidato “falso” para cumplir las apariencias.
Pero al igual que el otro político mochiteco, Francisco Frías Castro, el “independiente”, don Melchor también ya obtuvo su premio de consolación. O de lealtad partidaria.
Apenas el pasado martes lo nombraron director general del Conalep en Sinaloa.
El doctor Enrique Villa Rivera, Secretario de Educación Pública y Cultura, por instrucciones del ejecutivo estatal, le otorgó el cargo al señor Angulo que según me dicen, anda loco de contento en Palacio de Gobierno, como si se hubiera sacado la lotería.
Y sí, se le sacó y sin comprar cachito.
Mire que recibir un chequecito cada quincena por no hacer nada…es como sacarse el melate ¿no?
¿Qué culpa tienen los estudiantes del Conalep? Me pregunto yo.
Hasta mañana.