Casas de empeño, ante larga cuesta de enero; la compra de oro va en desuso, señala Montepío

Redacción

Mazatlán Sinaloa QPEM. Las casas de empeño enfrentan un momento difícil en materia económica, que se complicará más en 2023. Las principales razones son que hay más competencia, la tecnología ofrece a los mexicanos opciones para obtener créditos a través de apps y las alhajas de oro van en desuso, reveló Ramón Peña-Franco, subdirector de Relaciones Institucionales de Nacional Monte de Piedad.
En entrevista, señaló mientras otros productos de crédito han crecido más de 10% anual de 2015 a la fecha, el número de clientes que hoy empeñan es menos de la mitad que en dicho año.
“El decrecimiento en la industria prendaria se debe a que las familias tienen cada vez menos alhajas de oro. Por un lado, en la pandemia tuvieron que vender buena parte para hacer frente a la crisis. Por otro, a las nuevas generaciones ya no les gusta comprar alhajas”, indicó.
El volumen de oro contenido en las alhajas que hoy se venden, dijo, es 80%, menor al que tenían en el año 2000. Esta tendencia continuará y cada vez habrá menos clientes con alhajas de oro para empeñar.
En el caso de Monte de Piedad, 90% de sus operaciones consisten en el empeño de joyas, principalmente de oro y relojes, por lo que Peña-Franco reconoció que se debe llevar a cabo una transformación profunda en la institución, para seguir siendo una fuente de apoyo.
Además, el contrato colectivo del Monte de Piedad representa 66% del total de sus costos. Actualmente, ante la falta de acuerdos con el sindicato, hay un emplaza-miento de huelga que vence el 20 de enero de 2023.
Fuente: Excélsior