- Multitudinario Cierre de Campaña del Candidato a Gobernador de la Coalición PRI-PVEM-PANAL
- Sinaloa y sus familias ya decidieron: Quirino gobernará
Culiacán, Sinaloa; junio 1 de 2016
De Las Coloradas, de San Benito, de la Renato Vega, de la Zapata, de la 21 de Marzo, del sector Servidores Públicos y otras colonias aledañas empezaron a bajar cientos de familias para poblar el cierre de campaña de Quirino Ordaz.
Mujeres con niños en brazos, hombres de la mano de sus hijos, abuelas empujando carreolas con sus nietos, jóvenes sonrientes y en pareja, todos con un solo objetivo: reiterar su apoyo al candidato a gobernador por la coalición PRI-PVEM-PANAL.
Todos adoquinando la misma idea, subidos al mismo proyecto.
A pie, de raite, en bicicletas, en moto, en camionetas particulares la gente llegaba entre gritos de ¡Puro Sinaloa!, ¡puro Sinaloa! Primero unos cuantos, luego varios, algunos, decenas, a puños, cientos, miles tras la huella de quien, ellos mismos lo aseguraban, será el próximo gobernador del estado.
La cita tenía que ser en un sector popular, donde Quirino centró sus propuestas, esparció su noción de gobierno. Pronto el camellón del bulevar se atestó de gente.
El sol parecía colgado de los cables de luz y pegaba con mazo. Pese al calor y sudor nadie dio marcha atrás. La permanencia de todos fortalecía el compromiso ciudadano, la adhesión al proyecto de gobierno de Quirino Ordaz.
La música también tomó su lugar, se regodeaba en las bocinas, donde más gente encontraba sombra. Y salieron las banderas apuntando a lo alto a continuar el baile de quienes las empuñaban. Banderas que decían y gritaban y volvían a gritar Quirino gobernador, Quirino gobernador.
Y llegó Quirino. Subió al templete y saludó a los suyos. La algarabía tronó al unísono. La entrega fue plena, sincera. Ahí estaban los trabajadores del STASE, los integrantes del Sindicato del Seguro Social, la gente del STASAC, la comunidad cultural, del PANAL, del Verde…
Y ahí también había llegado doña Carmen Salas, de la colonia Zapata, que llevaba más de hora y media a la espera.
“¿Cuánta gente habrá venido?”
“Huuy, oiga, póngale que vino un mundo de gente”.
Luego doña Carmen recapacita y dice: “mejor diga que vinimos un chingo, que somos un chingo”.
Luego aparecieron los mensajes de Rosa Elena Millán, Aarón Irízar, Jesús Vizcarra, Juan Millán y Rossy Fuentes, la esposa del candidato.
Y entonces Quirino Ordaz estuvo frente a todos, dispuesto a hablar derecho, franco. Arrojó las tarjetas del discurso y dijo:
“Hoy concluye una etapa, y el próximo domingo arrancamos una mejor, que es la del desarrollo de Sinaloa de la mano de todos ustedes. Gracias por recibirnos en sus corazones”.
Después del sudor y esfuerzo de la campaña política de dos meses, Quirino Ordaz les pidió el corazón para ganar la elección del próximo 5 de junio y con ello ser el gobernador de los sinaloenses.
Porque a partir del domingo este estado será ¡Puro Sinaloa! Porque a Quirino Ordaz nadie lo alcanza. Nadie lo tumba. Sinaloa ya decidió: Quirino gobernador, como alegremente gritaban las banderas.
