A través de un repertorio que incluyó piezas clásicas, populares, contemporáneas y regionales el Ensamble Repercusiones del Instituto de Cultura de Mazatlán dio continuidad la tarde del martes al programa “M Artes de Cultura” en la Plazuela República.
Bajo la dirección del maestro Max Carreón, los 12 integrantes de la agrupación mostraron de principio a fin el hierro con el que son forjados en la Escuela de Música del Instituto de Cultura de Mazatlán al interpretar cada uno de los distintos instrumentos percutivos a lo largo del espectáculo: cencerros, tarolas, congas, baterías, panderetas y distintos tipos de marimbas.
Más que una experiencia recreativa, el maestro Max Carreón buscó informar al público sobre la historia y composición de algunas de las canciones mientras su agrupación las interpretaba.
A partir del poderío de una canción estilo “marching band”, que crea figuras musicales al unísono de los tambores; y el peculiar sazón de “El sinaloense”, de Severiano Briseño, la Plazuela República fue poblada poco a poco por la gente que llegaba atraída al escuchar las alegres canciones.
De la música regional sinaloense, los instrumentistas viraron hacia el clasicismo del “Concierto grosso RV 91” del compositor italiano Antonio Vivaldi y obsequiaron al público un vibrante y muy aplaudido popurrí de canciones veracruzanas compuesto por “La bruja”, “El cascabel” y “La bamba”.
En la última recta del recital los jóvenes músicos se llevaron las palmas y la admiración del público con el vals peruano “Fina estampa”, de Chabuca Granda, y el primer y tercer movimiento de “Percutata”, de Gerardo Tamez, que ayuda en la formación inicial de los estudiantes de percusiones y está inspirada en los tradicionales ritmos mayas y aztecas.
El programa “M Artes de Cultura” continúa el martes 30 de mayo, a las 18:00 horas en la Plazuela República con la presentación del Ensamble de Jazz del Instituto de Cultura de Mazatlán.
