*Encabeza 3 posadas más: Las Flores, Bugambilias y Las Quintas
Culiacán, Sin. 22 de diciembre del 2017.- El presidente municipal Jesús Valdés Palazuelos encabezó tres posadas más este viernes en el Infonavit Las Flores, Bugambilias y Las Quintas, en donde como acostumbra saludó de mano a las varias decenas de asistentes en cada evento, ante quienes externó su deseo de que la armonía familiar sea la que prevalezca en estas fiestas decembrinas y que el próximo año sea de muchas satisfacciones.
De igual manera invitó a los adultos a cuidar y proteger a lo más valioso que tienen en sus hogares, que son los niños, para quienes precisamente se han estado organizando estas fiestas.
En el Infonavit Las Flores fueron varias decenas de vecinos y vecinas las que le agradecieron los trabajos de remodelación y pintura de todos los edificios multifamiliares, los cuales ahora tienen una atractiva imagen, además de que la cancha deportiva ahora luce más iluminada, donde precisamente tuvo lugar la posada.
Bryant Castro Ávila, líder del sector, a nombre de todos los beneficiarios le agradeció a Jesús Valdés las acciones de mejora en este sector, que también han incluido recolección de basura y más vigilancia.
En respuesta, el presidente municipal hizo el compromiso de seguir trabajando con renovados esfuerzos el próximo año para mejorar las condiciones de este sector del cual los mismos vecinos se habían quejado estaba en el abandono.
El mismo compromiso hizo el alcalde ante las varias decenas del sector Bugambilias, en donde la lideresa de la colonia, Alma Angelina Navarrete, le agradeció el gesto de fomentar en todas las colonias el rescate de las tradicionales posadas, ya que ello ayuda a la convivencia entre los vecinos, así como a fortalecer la unidad familiar
En la última posada Jesús Valdés se reunió con los vecinos de toda su vida, pues tuvo lugar justo enfrente de la casa materna, enfrente del famoso “Pitón”de la colonia Las Quintas, que es un ícono del Culiacán colonial. Los padres del alcalde, la profesora Elisa Palazuelos y el ingeniero Serapio Valdés, fungieron como buenos anfitriones.