Rodando el balón

 

Mal momento del pastor.

Bienvenidos a esta su columna rodando el balón que será presentada desde este portal todos los martes, con crónicas distintas que el futbol no pueda dar.

El Guadalajara no pasa por un buen momento, pero lejos de no encontrar un rumbo o las complicaciones que existen para poder tener un funcionamiento colectivo optimo que logre la contundencia, jugadores que no están cerca del nivel que demostraron el clausura 2017 y con un juego colectivo aun con algunas deficiencias, lesiones inesperadas y falta de contundencia tienen al rebaño sumergido en una crisis con solo una victoria en este torneo en la posición 17 de la general.

Hay un hombre dentro del desastre que no ha perdido la ecuanimidad, la positividad, y sentido de crítica constructiva hacia su accionar con su plantel, a Chivas las circunstancias lo hacen un equipo peculiar y muy diferente a los demás es el más querido del país, con mayor número de aficionados.

Pero la pregunta más frecuente es que le paso al equipo después de lograr el épico título ante Tigres aquella gloriosa tarde del verano en 2017, cuando ante todo pronóstico derrotaron al amplio favorito para muchos el plantel más caro de la Liga.

Hay muy poca memoria del colectivo de parte de muchos medios, afición, y de mucha gente que rodea el entorno del Guadalajara Almeyda le cambio la cara al equipo, pero no solo con buenos resultados me queda claro son muy variables, aunque necesarios, el entrenador no sale a la cancha ni disputa cada balón, me queda claro que les da muchas herramientas a sus jugadores para competir en maneras óptimas.

Almeyda encontró en el campeonato las mejores formas y armo un equipo desde su once muy competitivo con las herramientas que estaban a su alcance, aclaro que la desventaja de jugar solo con mexicanos se genera desde el argumento que no permite fichar siempre a los mejores mexicanos en el mercado, simplemente porque el precio los hace inalcanzables y porque muchos al ser rivales directos de la misma competencia lo piensas dos veces o ponen el punto monetario

muy a su favor para poder finiquitar una venta, caso Pachuca por ejemplo que no es malo ni mucho menos al contrario es un ejemplo de cómo tramitar una buena administración deportiva.

Han llegado algunos gracias a la inversión de la directiva al esfuerzo por generar un equipo de calidad en todos los sectores del campo y se han acoplado bien con sus desazones e irregular nivel en algunas ocasiones.

Almeyda lejos de los reflectores que puede tener y ha ganado a pulso, tiene un premio mejor que es la credibilidad de sus jugadores y un sistema y estilo de juego que puede funcionar o no, pero está impregnado en el esquema de juego y sobre todo en el ADN de sus jugadores.

Olvidémonos de números de rachas, de títulos hasta de contrataciones, la oportunidad a los canteranos es algo que siempre será refrescante, productivo y novedoso por una sencilla razón es el futuro de nuestro futbol la magia de enmarcar las entrañas el dar paso a quien lo pelea desde lo más bajo y Almeyda y el Guadalajara lo siguen haciendo.

Es difícil la liga Mx, es peculiar sino me creen pregúntele a Cruz Azul, Monterrey a quien elijan o quieran poner como ejemplo, inversión no te condiciona a ganar, un buen organigrama directivo y deportivo si.

Siendo honestos si Almeyda no hubiese ganado el titulo con Chivas conociendo a Vergara quizá ya no estuviera como pastor del rebaño, pero de los De La Torre, Galindo, Van´t Schip, Almeyda es por mucho quien mejor impregno su ideología.