* Cumplen pescadores ribereños con acuerdos para una pesca responsable en la zona autorizada, fuera del área de refugio de la vaquita marina.
* Es el primer año que las embarcaciones ribereñas en esa región son monitoreadas para verificar que sólo realicen la pesca en la zona autorizada.
* Los pescadores permisionarios obtuvieron la autorización de la Manifestación de Impacto Ambiental y la exención correspondiente, otorgadas por la SEMARNAT.
La Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (CONAPESCA) reportó que se desarrolla en orden la temporada de pesca de curvina golfina en las aguas marinas de la Zona de Amortiguamiento de la Reserva de la Biósfera del Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado, destacando que al estar en curso la tercera marea de la presente temporada de captura, ha prevalecido por parte de los pescadores ribereños el cumplimiento de la normatividad y disposiciones que regulan la pesquería.
La dependencia sectorizada en la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA) señaló que en la actual temporada sólo se encuentran autorizadas para realizar la pesca de Curvina golfina al amparo de permisos, las embarcaciones menores de las cooperativas y permisionarios de Golfo de Santa Clara, Sonora, así como las organizaciones pesqueras de la etnia Cucapah.
En agosto de 2005 se publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el “Acuerdo por el que se establece veda temporal para la captura de curvina golfina (Cynoscion othonopterus), en las aguas marinas y estuarinas de jurisdicción federal de la reserva de la biosfera Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado, durante el periodo del 1 de mayo al 31 de agosto de cada año”, por lo cual el periodo de aprovechamiento de dicha especie, queda limitado entre el 1 de septiembre y el 30 de abril cada año.
Los pescadores autorizados para capturar la curvina emplean en forma de cerco una arte de pesca activa que no interactúa con especies protegidas y que, además, se usa en una zona delimitada, alejada del Área de Refugio de la Vaquita marina, por lo que en su oportunidad obtuvieron la autorización de la Manifestación de Impacto Ambiental y la exención correspondiente, otorgadas por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT).
Para los pescadores de la región del Golfo de Santa Clara, la pesquería de curvina golfina impacta de manera importante tanto en lo pesquero como en lo económico, pero también en el aspecto de la sustentabilidad, ya que se basa en la normatividad, los planes de manejo y en el monitoreo administrativo que verifica las entradas y salidas de las embarcaciones, señaló Carlos Tirado Pineda, Presidente de la Federación de Pescadores de la Reserva de la Biosfera.
Destacó que la pesquería de curvina es una de las más sustentables en México, ya que se emplea el arte de pesca que cumple con la norma oficial que es la 5¾, la cual da la seguridad que las especies capturadas son de tallas comerciales, respetando las cuotas establecidas.
Cabe recordar que la SAGARPA determinó recientemente una cuota de captura de 4,530 toneladas de peso entero para la temporada de pesca 2018, con lo que se protege el nivel de disponibilidad de esta especie en las zonas de producción del Golfo de California.
La dependencia federal indicó que mediante Acuerdo publicado en el Diario Oficial de la Federación se establece la cuota de captura para el aprovechamiento de curvina golfina, en el período de pesca de este año, cuyo volumen equivale a 3,390 toneladas de peso eviscerado, que corresponde a 4.58 toneladas por embarcación y 92 de vejiga natatoria (“buche”) por todas las embarcaciones.
Se dio a conocer que el operativo de vigilancia desplegado por la CONAPESCA, en coordinación con la Secretaría de Marina – Armada de México (SEMAR), la Policía Federal a través de su división de Gendarmería Ambiental y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), ha permitido verificar el control y la supervisión de las operaciones de pesca ribereña en la región, asegurando la observancia normativa, el respeto a las cuotas de captura y que la pesca se realice con el medio autorizado en la zona delimitada para ello.
Lo anterior fue confirmado por las unidades de vigilancia apostadas frente a las costas de Golfo de Santa Clara, Sonora, así como por los patrullajes acuáticos en unidades de superficie de la SEMAR y sobrevuelos de reconocimiento efectuados por aeronaves de las instancias que participan en el operativo.
Este 2018 es el primer año que las embarcaciones ribereñas en esa región son monitoreadas con tecnología de punta a través de un dispositivo adherido a las mismas, que no sólo permite determinar con un alto nivel de confianza que realicen la pesca en la zona autorizada, sino que además no realicen pesca nocturna por estar prohibida y que embarquen y desembarquen en los sitios de arribo limitativamente establecidos, en los que se verifica el original del permiso de pesca, el arte de pesca utilizada y el producto pesquero arribado.
Con tal equipamiento se verifica también el código QR vinculado al programa de monitoreo comunitario para contabilizar las capturas y dar seguimiento a la cuota establecida, lo que constituye un esfuerzo comunitario con apoyo de la CONAPESCA, CONANP, gobiernos
estatales de Sonora y Baja California, así como la organización no gubernamental Environmental Defense Fund de México A.C. (EDF).
El manejo de esta pesquería a través de cuotas de captura contribuye a tener un mayor control sobre la extracción de este recurso, con base en su disponibilidad biológica, lo cual genera mayor certidumbre al sector pesquero sobre los organismos que puede extraer durante la temporada de pesca y con ello mantener la continuidad de su fuente de ingresos.
El producto de las capturas de Curvina golfina no sólo ha fortalecido la mayor disponibilidad de pescados y mariscos mexicanos de alto valor nutricional y precio accesible en esta temporada de cuaresma, sino también una derrama económica en esa región noroeste del país que beneficia a los pescadores, a las comunidades pesqueras y a la cadena productiva que abarca a miles de familias.
El 1 de mayo inicia el período de veda de Curvina golfina en aguas marinas de la Zona de Amortiguamiento de la Reserva de la Biosfera del Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado.