Rompecabezas.- STASAM

 

STACreyéndolo un novato en cuestiones políticas, el líder del sindicato de trabajadores del ayuntamiento, quiso llevar al baile al Secretario General de Gobierno, pero se topó con pared.

El sábado pasado y aprovechando la presencia de Gerardo Vargas Landeros en Mazatlán, quien vino a encabezar la Feria de Servicios de Gobierno del Estado, Jesús Osuna Lamarque, quiso “engatuzarlo”.

Su intensión era meterlo a la bronca que el sindicato y él mantienen contra la administración municipal y contra el alcalde Carlos Felton y que ha llegado ya a cuestiones de tipo personal. Malo.

Pero al dirigente del Stasam le salió el tiro por la culata. O al menos, Vargas Landeros, no se fue con la finta ni cayó en la trampa.

Ducho para manejar la mano izquierda, el segundo hombre en importancia en el gabinete “malovista” les dio por el lado. Pero cuando lo quisieron acorralar para que tomara partido en el conflicto, les paró los tacos.

Dijo ser muy respetuoso de los asuntos internos que en este caso sólo les compete dirimir a las partes involucradas, es decir, al sindicato y al alcalde.

Les dijo que el gobierno estatal sólo puede actuar en este tipo de asuntos como un mediador, pero hasta ahí. Sin tomar vela en el entierro.

Los sindicalizados acudieron, en un acto desesperado (válido al fin), con pancartas y en una especie de mitin, le echaron porras al titular de la SGG quien dio sus palmaditas y se retiró.

Ayer el presidente municipal reiteró que Osuna Lamarque está utilizando a los trabajadores como “carne de cañón” para un asunto que es estrictamente político y personal.

A Felton nadie le puede quitar de la cabeza que el secretario general del sindicato está presionando, pero para buscar una regiduría en el PRI y no precisamente por así convenir a los intereses de sus representados.

Por su parte, Osuna Lamarque jura y perjura que no anda en busca de una candidatura, que lo que pelea es lo que le corresponde en derecho al sindicato; las jubilaciones. Más de 100.

Lo que sí está claro es que el tema y las negociaciones están entrampadas y no se ve quién pueda hacerlos entrar en razón.

Hasta mañana.